COPLEANDO

Te lo dijeron muchas veces

Y no lo quisiste entender

Que su querer no es sincero 

Que anda rondando con otras

Que sólo por tu apellido te quiere

Que tus caudales solo interesan

y un día te vinieron a decir

que por las tabernas  se reía

y no lo supiste entender

que su querer no es sincero

Pues  de ti se anda burlando

Por las tabernas de ronda

Pero a ti no te importa la gente

Porque andas enamoradita perdía

De un mal amor, no correspondido

Que de ti se anda burlando.

Maldito sea el querer

que te ha nublao el sentío

y te olviaste de mi

que te he querío de veras

EL OTRO LADO DE LA LUNA

Emilia, era una mujer soltera, con casi cincuenta años. Nunca había tenido ninguna relación sentimental con nadie. Siempre había vivido con su madre, y no sentía la necesidad de una relación. Siempre pendiente de sus padres, viviendo por ellos y para ellos. Hasta que un día se dio cuenta que no había vivido la vida que ella quería, sino siempre la que los demás querían. Se preguntó si no había perdido toda su vida, por vivir la de otros. Pensó que le gustaría salir, por ejemplo al cine, a cenar con amigos, culturizarse un poco más. Decidió apuntarse a club de lectura porque le gustaba leer pensó, que si se leía en grupo, y se comentaba entre todos se disfrutaba mucho más de la lectura. Así lo hizo. Y descubrió que había mas mundo además de su casa y sus  padres. El tiempo que dedicaba al club le lectura, era su tiempo, el que dedicaba para ella, era su espacio, su libertad. Cuando se dio cuenta estaba tomándose un café con los compañeros. Incluso salió a la cena de fin de curso, y se sorprendió a si misma contando chistes, riendo, bailando. Ella estaba feliz, pero a sus padres no les gustó, estaban acostumbrados a que estuviera siempre con ellos, y sentían que los había abandonado, a pesar de que seguía viviendo con ellos, y los cuidaba igual. Un día cuando volvió del club de lectura su padre le esperaba enfadado, y le reprochó que los había dejado solo mucho tiempo. En ese momento se sintió culpable. Pero decidió que no, no se dejaría manipular, y tampoco aceptaría ningún chantaje emocional más. Siempre había visto este lado de la luna. Y ahora que estaba empezando a ver el otro lado de la luna, no estaba dispuesta a volver atrás. y decidió que el otro lado de la luna, no estaba nada mal.

SONREIR A LA VIDA

A VECES LA VIDA TE DA ZARPAZOS

ES CRUEL Y DESPIADADA

QUE TE HACE PREGUNTARTE.

¿QUÉ HE CHECHO MAL PARA MERECER ESTO?

DOS HIJOS HA PERDIDO MARÍA.

LOS DOS EN ACCIDENTES DE TRABAJO

LOS DOS MUY JOVEN

QUE LE ROMPIERON EL CORAZÓN

DESPUÉS SU MARIDO EMFERMÓ.

AL QUE CUIDÓ CON ESMERO, Y SIN QUEJARSE.

CON CUIDADOS Y CARIÑO, DÍA A DÍA CUIDA SIN DESALIENTO.

HASTA EL ÚLTIMO SUSPIRO DE SU MARIDO.

PASA EL TIEMPO. Y SU YERNO SUFRE UN ICTUS CEREBRAL

FALLECE  TAMBIÉN

CUANDO SE ESTABA RECUPERANDO.

UN NUEVO SUSTO: A MARÍA LE DIAGNOSTICAN UN  CÁNCER

DOLODOROSISIMAS PRUEBAS:

PINCHAZOS EN MEDULA…

LAGRA SUPERAR EL CÁNCER.

Y ESTA SEMANA POR SI TODO FUERA POCO

FALLECE SU NIETA CON 25 AÑOS

¿CÓMO PUEDE UN SER HUMANO SOPORTAR TANTO?

VECINA GENEROSA

SIEMPRE DISPUESTA A AYUDAR

CON SUS BROMAS

Y A PESAR DE TODO 

CON UNA SONRISA EN LA BOCA

CON GANAS DE VIVIR

QUE LE AYUDA A SOPORTAR

TODO LO QUE LE HA VENIDO

LE SIGUE SONRIENDO A LA VIDA

AUNQUE POR DENTRO ESTÉ DESTROZADA

DA ANIMOS A LOS DEMÁS    

ES UN EJEMPLO PARA LOS QUE NOS DERUMBAMOS

POR MUCHO MENOS

ESTOY MAYOR

En marzo fue mi cumpleaños. Ya tengo unos cuantos, y ya empiezo a notar algunos síntomas, como por ejemplo, el insomnio, entre que veo mucha televisión, y luego por la noche cuando me acuesto me pongo los auriculares y escucho la radio, no consigo dormir mucho. Y empiezo a dormirme cuando empieza amanecer, que es cuando me tengo que levantar.  Y así me va durante el día: voy a la frutería a comprar por ejemplo alcachofas, pago, y me voy tan tranquila, y la frutera: - señora que se deja la bolsa. Sigo caminando y una vendedora de la O.N.C.E, me ofrece un  cupón, le doy cinco euros, me da el cupón y me iba tan tranquila. Y la vendedora: - señora que me ha dado cinco euros, espere que le tengo que devolver dinero-. Estos despistes me tienen un poco “mosca”. Y es que ya se meten conmigo y me dicen –abuela, que estás mayor-. Lo malo, es que luego tengo todo el día un cuerpo de jota, y una alegría, como si hubiera pasado toda la noche por ahí de juerga. Y después de comer,  me que do dormida. Lo malo es que si ya de por si soy un poco vaga. El insomnio lo agrava un poco más. Voy a intentar ver menos televisión, y evitar poner la radio por la noche. Pero es que me he acostumbrado a ponerme los auriculares para dormir. Con lo malo que es para mis oídos. Y además yo creo que me desvelan más todavía. Algunas noches me las paso poniéndome y quitándome los auriculares. Y cuando me doy cuenta ya se ha hecho de día. Y yo me digo –y ahora quien se levanta- : después de la radio, mamá que se levanta para ir al  baño, varias veces, o le ha hecho mal la digestión, o le duele la rodilla. Pero lo más me preocupan son mis despistes. A ver si estoy empezando con una demencia. Que susto